¿Cuándo fue la última vez que viste una luciérnaga? ¿Eran más abundantes cuando eras más joven, pero quizás ahora no recuerdas la última vez que las viste?
Estas "joyas de la noche", que suelen brillar tras el atardecer a finales de primavera y verano, están presentes, ¡pero muchas podrían estar en peligro! Veamos qué necesitan las luciérnagas para sobrevivir, su relación con la cuenca del río San Antonio y cómo podemos ayudarlas.
Linternas de la naturaleza: explicación de los destellos de las luciérnagas
Las luciérnagas, o como muchos las llaman, luciérnagas, son una familia de escarabajos capaces de bioluminiscencia (emitir luz biológicamente) durante al menos una etapa de su vida. Su bioluminiscencia actúa como una advertencia para los depredadores, ya que contienen una toxina. Con el tiempo, se cree que esta capacidad de iluminar se adaptó como ritual de cortejo para atraer a una pareja, razón por la que la mayoría de nosotros hemos llegado a reconocerlas y apreciarlas.
Las luciérnagas generan luz mediante un proceso químico que se lleva a cabo en células especiales ubicadas en su abdomen. Observación © Misty Keith · algunos derechos reservados
¿Sabías que algunas luciérnagas no pueden destellar cuando son adultas, pero sí pueden emitir luz cuando son larvas? Normalmente, solo las notamos cuando son adultas, cuando descienden del suelo en busca de pareja, deslumbrándolas (¡y a nosotros también!) con su espectacular espectáculo.
Las luciérnagas pasan la mayor parte de su vida en la etapa larval, ¡algunas hasta dos años! Si bien las larvas de luciérnaga son depredadores beneficiosos de animales más pequeños como caracoles, babosas y similares, son vulnerables en esta etapa de su vida, especialmente a las condiciones ambientales.
Las larvas de algunas especies de luciérnagas (como la de la foto) pueden emitir luz propia. Observación © Alison Place algunos derechos reservados
¿Dónde viven las luciérnagas en nuestra cuenca hidrográfica?
Las luciérnagas dependen de hábitats que retengan suficiente humedad para evitar que se sequen, les proporcionen las fuentes de alimento adecuadas y un entorno saludable sin pesticidas ni contaminación lumínica. Dado que sus principales fuentes de alimento no suelen encontrarse en suelos secos o degradados, las luciérnagas necesitan un perfil de suelo saludable, que generalmente incluye una capa superior de... detritoLos detritos, como las hojas caídas y la corteza, son el mantillo gratuito de la naturaleza, que recicla los nutrientes en el suelo y, al mismo tiempo, retiene la humedad.
El personal de la Autoridad del Río realizó varios estudios de luciérnagas en toda la cuenca del río San Antonio el verano pasado.
Luciérnaga común del este (Photinus pyralis) se ha observado en la cuenca del río San Antonio. © Mishanook · algunos derechos reservados
Si bien las luciérnagas se pueden encontrar en todo el mundo y en una variedad de hábitats, el tema común es que no persisten en áreas sin alguna fuente de humedad. Puede haber aproximadamente 15 especies de luciérnagas que habitan la cuenca del río San Antonio, y su necesidad de humedad significa que muchos de ellos pueden encontrarse en áreas naturales cerca de nuestros arroyos y ríos. Esto puede ser especialmente cierto a medida que las condiciones se tornan más secas y cálidas, ya sea por efecto estacional o agravado por el cambio climático y la falta de espacios naturales.
Amenazas a las luciérnagas
A medida que el desarrollo urbano aumenta y se expande, las amenazas a las luciérnagas dificultan su supervivencia. La contaminación lumínica, los pesticidas, la sequía, la degradación de las tierras y los hábitats son algunas de las mayores amenazas para las luciérnagas.
Las luciérnagas pueden utilizarse como bioindicadores debido a su sensibilidad a la contaminación lumínica y a la calidad y disponibilidad del agua. Unas poblaciones de luciérnagas sanas y sostenibles pueden indicar un ecosistema saludable.
Si buscas proporcionar un hábitat para las luciérnagas en el lugar donde vives y mantener su luz brillando, ¡prueba estas acciones fáciles pero poderosas!
Plantar plantas nativas + Deja las hojas! Las plantas nativas se adaptan a nuestro clima y patrones meteorológicos, y muchas pueden sobrevivir a nuestros ciclos de sequía y calor, lo que puede brindarles a las luciérnagas un lugar seguro donde refugiarse, lejos de céspedes secos y excesivamente cortados. Dejar hojas en el jardín les proporciona aún más espacio para encontrar alimento y refugio a lo largo de su ciclo de vida.
¿No quieres cambiar tu jardín? Las luciérnagas tienden a preferir trepar por las hojas largas de hierba antes de posarse. Cortar el césped demasiado corto o con demasiada frecuencia puede dañar a las luciérnagas que puedan estar descansando en él, especialmente a finales de primavera y en verano. El césped más largo, como el pasto azul pequeño o el pasto Texas Cupgrass, también retiene más humedad en la capa superficial del suelo, lo que significa un menor consumo de agua y una mayor retención.
Sea amigable con el cielo oscuro! La contaminación lumínica sigue aumentando, pero también es un problema muy fácil y rentable de revertir. Las luces que protegen el cielo oscuro son de colores cálidos, están protegidas y son focalizadas. Obtenga más información sobre cómo promover espacios nocturnos seguros a través de DarkSky Internacional.
¡Evite los pesticidas! Insectos como las luciérnagas y sus larvas son susceptibles a los pesticidas. Las aplicaciones de nebulizadores exteriores y los aerosoles líquidos más tradicionales pueden matar insectos beneficiosos, como polinizadores y luciérnagas, y perturbar la cadena trófica de muchos otros animales, como aves, peces y mamíferos. Los nebulizadores exteriores también pueden ser perjudiciales para la salud humana y contribuir a la contaminación del aire.
Si no se puede evitar el uso de pesticidas:Siga siempre las instrucciones de la etiqueta, aplíquelo con moderación y utilice pesticidas líquidos específicos (no en aerosol ni nebulizadores) que puedan reducir el daño accidental a plantas y animales no deseados.

¡Difunde la conciencia! Busque luciérnagas en su vecindario, parques y espacios verdes locales y Comparte el asombro por las luciérnagas y las formas de ayudarlas!
Las luciérnagas son más que un elemento mágico de las noches de verano en la cuenca del río San Antonio: son indicadores poderosos de un entorno saludable y próspero, ¡y un recordatorio de la belleza natural que nos une a todos! Desafortunadamente, las luciérnagas y sus hábitats se ven cada vez más amenazados por el desarrollo urbanístico, lo que pone en riesgo su futuro y la salud de nuestros ecosistemas. Al crear espacios seguros y saludables, ya sea plantando vegetación nativa, reduciendo la contaminación lumínica o simplemente dejando reposar las hojas, no solo ayudamos a las luciérnagas, sino que también fortalecemos nuestra conexión con la naturaleza y con los demás. Juntos, como comunidad, podemos proteger la salud de nuestros ríos, parques y vecindarios, y asegurar que las luciérnagas sigan siendo un tesoro de nuestro paisaje compartido para las generaciones venideras.